Doblas: Marcharon para repudiar condena por abuso

Vecinos y vecinas de Doblas se movilizaron ayer domingo por la tarde en repudio a la condena de tres años de prisión en suspenso impuesta a una mujer de 38 años por agredir sexualmente a su hija menor de edad. Con una fuerte aplaudida, las personas autoconvocadas marcharon alrededor de la plaza para pedir Justicia por la víctima y que se revea la pena.

Pasadas las 18 del domingo, unas 60 personas se concentraron en la plaza de la localidad. "Exigimos Justicia para la víctima y acompañamos a la familia. Repudiamos el fallo y que la mujer se encuentre en nuestra localidad", dijo a LA ARENA la vocera de la manifestación.

Los vecinos y vecinas se reunieron en el espacio con carteles que decían "Por infancias libres de abuso", "Los niños no mienten", "Los niños no se tocan, no se violan, no se matan", "Sin Justicia no hay paz", entre otros. Luego comenzaron una manifestación pacífica, con aplaudidas, alrededor de la plaza.

"Queremos que se revea la pena", habían mencionado allegados a la víctima el viernes pasado. También comentaron que realizarán una colecta de firmas. "La mujer ya está en Doblas, lo que queremos es evitar que pueda establecer contacto con la víctima y con sus otros hijos", afirmaron.

Asimismo, se manifestaron en contra de que la imputada pueda volver a su espacio de trabajo, en un establecimiento de salud de la localidad: "No se le revocó la matrícula y queremos que se revea eso también, nos parece peligroso que esté en un ámbito donde pueda estar en contacto con menores".

Condena.

Cabe recordar que la semana pasada fue el juez de audiencia santarroseño Andrés Olié quien condenó a la mujer a tres años de prisión en suspenso, por el delito de abuso sexual simple en perjuicio de una persona menor de 13 años; agravado por haber sido ejecutado contra su hija, como delito continuado. No obstante, la absolvió de la acusación de suministro de material pornográfico a una menor de 14 años.

Con las pruebas reunidas se dio por comprobado que durante 2018 y hasta julio de 2019, la imputada agredió sexualmente a su hija -que en ese momento tenía entre seis y siete años-, en forma reiterada, con diferentes tipos de tocamientos.

Durante los alegatos, la Fiscalía había solicitado una pena de 10 años de prisión efectiva por considerar que la madre había cometido abuso sexual con acceso carnal agravado contra una menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente, y por ser cometido por su ascendiente; en concurso real con suministro de material pornográfico a una menor de 14 años; y pidió el mantenimiento de la prisión preventiva por entender que esas conductas "podría reiterarlas con otros hijos". La querella adhirió a esos planteos en nombre de la víctima; mientras que la defensa pidió la absolución de la progenitora por el beneficio de la duda.



Fuente: La Arena

Comentarios

Comentar artículo