Mesa Provincial de Zoonosis alertó sobre la peligrosidad de la Influenza Aviar
Desde la Mesa Provincial de Zoonosis, se recordó que la Influenza Aviar es una enfermedad que nunca ha estado presente en Argentina, por lo que se la considera exótica y cualquier sospecha...
Desde la Mesa Provincial de Zoonosis, se recordó que la Influenza Aviar es una enfermedad que nunca ha estado presente en Argentina, por lo que se la considera exótica y cualquier sospecha es obligación comunicarla a los organismos correspondientes.
Ante los casos de mortandad de aves silvestres migratorias registrados en Perú, Ecuador y Venezuela, y algunos casos detectados en criaderos traspatio y comerciales de aves de corral en estos países, se solicitó a la población en general, turistas, fotógrafos de fauna silvestre, productores, etc. que ante la detección de mortandad de aves migratorias, acuáticas y rapaces, o detección de aves con incoordinación, temblores, problemas respiratorios, diarrea o cualquier comportamiento anormal, se comuniquen con el Ministerio de la Producción, a la Dirección de Ganadería (Tel: 02954 - 452634, DireccionGanaderia@lapampa.gob.ar) y la Subdirección de Fauna (2954 - 292409, faunarecursosnaturales@gmail.com) y también a la oficina local de Senasa: 02954 - 456620, notificaciones@senasa.gob.ar.
La Influenza Aviar afecta a las aves, tanto de corral como silvestres. Las aves acuáticas y playeras se consideran los reservorios naturales de este virus y no suelen enfermarse, aunque esto parece estar cambiando ya que se han detectado mortandades de estas especies relacionadas a la presencia del virus H5N1. Ante esta situación resulta fundamental aumentar los esfuerzos de vigilancia en el país, por lo que la Mesa Provincial de Zoonosis solicitó se notifique la aparición de aves silvestres o de corral muertas o con sintomatología compatible:
Síndrome de caída de postura en ponedoras (SCP): caída brusca en la producción de huevos superior al 5 % durante más de dos días. Los huevos pueden ser deformes, sin pigmentación, de color anormal, ásperos, de cáscara delgada o sin cáscara y con albúmina acuosa.
Síndrome neurológico (SN): tortícolis, opistótonos, movimientos rítmicos laterales de la cabeza, temblores, ataxia, incoordinación, paresia o parálisis, espasmos clónicos, desorientación, nistagmo, alteraciones visuales, movimientos circulares y convulsiones.
Síndrome respiratorio (SR): estornudos, tos, jadeo, rales, supuración ocular y nasal, senos paranasales infraorbitarios inflamados o sinusitis, conjuntivitis asfixia y estertores. La cabeza y el cuello se encuentran extendidos hacia delante y hacia arriba durante la inspiración.
Es importante recordar que la influenza aviar es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta tanto a las aves domésticas como a las silvestres. La mayoría de los subtipos del virus influenza que circulan en aves no son zoonóticos (enfermedades que se transmiten de los animales a las personas). Sin embargo, algunas cepas de la influenza aviar altamente patógena tienen la capacidad de infectar a los seres humanos, representando una amenaza para la salud pública. El principal factor de riesgo es el contacto directo o indirecto con animales infectados o con ambientes y superficies contaminadas por heces.